domingo, 17 de octubre de 2010

Chipperfield.en.CORRUBEDO

 

 




[caption id="attachment_811" align="aligncenter" width="300" caption="Vistas desde el interior"][/caption]


Corrubedo, [ver situación] ha sido el marco escogido por arquitectos como Manuel Gallego o Iago Seara, (profesores además de la ETSA de Coruña) a la hora de proyectar sus propias viviendas. Sin embargo, si algo ha hecho famoso a este pequeño pueblo costero, ha sido la construcción de una pequeña casa de veraneo, obra del conocido arquitecto londinense David Chipperfield.


Autor de numerosas obras por todo el mundo, y sobre el cual, se ha realizado una exposición recientemente en Coruña [ver +] Chipperfield, ya contaba con proyectos en distintos puntos de España [+ info] sin embargo, será esta pequeña localidad pesquera de menos de 800 habitantes, la elegida para llevar a cabo su hogar de vacaciones. 


El solar


Tras una búsqueda exhaustiva, el solar escogido, estaría a escasos metros del mar, donde las viviendas cercanas de los años 60, voltean su mirada al mar, protegiéndose de él y de sus fuertes temporales, con muros ciegos o de minúsculos y mínimos huecos, dando preferencia a la ciudad.


El proyecto


La vivienda se entendería desde el interior, como es habitual en Chipperfield, la proyectaría entendiendola desde dentro, analizando las distintas actividades de las que su familia y él mismo, iban a ser los protagonistas: cocinar, leer, contemplar el mar..




[caption id="attachment_813" align="aligncenter" width="149" caption="Planta baja"][/caption]

Plantas superiores

La casa se centraría (a la inversa que sus vecinas) en el mar, la fachada norte, se abriría por tanto a éste, con grandes ventanales y haciendo una fachada sur, casi ciega, que la protegiese de miradas indiscretas, de quienes paseasen por la calle mayor.

En altura, estaría compuesta por 4 niveles, desde la playa una rampa comunicaría con los dormitorios de los hijos, como si de camarotes se tratara.Sobre esta planta se ubica el estar, con todo su frente de vidrio que mira al mar. Le sigue otro nivel de dormitorios y, en lo más alto, una terraza que, protegida por el estudio, sobresale hacia el Atlántico como queriendo alcanzarlo. Cualquier cerramiento que pudiese obstruir la visión se disuelve en la terraza de la cubierta, donde la familia prepara la barbacoa como si estuviese en la cubierta de un barco.

Aun respondiendo al mar, la casa de Chipperfield, consigue integrarse entre las mismas construcciones que de él se protegen. ¿El secreto? quizás la armonía que mantiene con ellas en cuanto a alturas, materiales y colores que utiliza, sean la clave, sin embargo, no repite sus geometrías, sino que las incorpora a su propia forma mediante líneas no del todo regulares, que responden a la cambiante superficiel del agua.

Usa la piedra además como base de la casa, para dar paso en plantas superiores a la ingravidez del cristal, una sensación de ligereza, que se hace más intensa al desvanecerse la casa en su cubierta.

Pronto Spn, se desplazará a Corrubedo, para al menos fotografiar in situ (ya que es imposible acceder a su interior) esta magnífica obra, de uno de nuestros arquitectos preferidos. Una casa en la que Chipperfield, ha aportado su saber hacer como arquitecto, sus preferencias como persona que habitaría ese hogar, y toda la demanda de necesidades que su familia le habria comunicado.

La perfección de las cosas pensadas por y para quien las vive.

 

 

 

Fachada norte

2 comentarios:

  1. a él no lo vimos pero su velero andaba x ahí nos contaron, un prototipo...

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  2. muy chula, la vi este verano (x fuera solo x desgracia). corrubedo es precioso!

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